 Alcanzar de Dios el perdón y la paz, la comprensión y la compasión, la ternura y el amor.  Se trata de acompañar y alegrar a los que están solos, acoger.

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Author: Marcos Robles Gutiérrez
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2  Alcanzar de Dios el perdón y la paz, la comprensión y la compasión, la ternura y el amor.  Se trata de acompañar y alegrar a los que están solos, acoger e integrar a los “sin papeles”, dignificar a quienes se sienten prostituidos, defender a los marginados, favorecer la no violencia, promover una sana ecología

3  Celebrar la clausura del Concilio Ecuménico Vaticano II.

4  Nos llama a todos a fijar la mirada y el corazón en María, “reina y madre de misericordia”.

5  Celebrar la clausura del Concilio Ecuménico Vaticano II.  Nos llama a todos a fijar la mirada y el corazón en María, “reina y madre de misericordia”.  Se esperan muchas vueltas a casa de hijos pródigos, mucha conversión a la misericordia de hermanos mayores y mucha vivencia entrañable de abrazos y besos por parte del Padre

6 “Júbilo” es alegría en el cielo y “Jubileo” es misericordia en la tierra

7  Cada día, cada instante, Dios mira al mundo, mira especialmente a los hijos de los hombres y encuentra motivos para la alegría y motivos para la tristeza.  Se entristece cuando ve los viacrucis de cada día, se alegra cuando ve las resurrecciones y pascuas de cada día.  Cuando Dios ve a sus hijos que piden perdón e indulgencia, Él derrocha perdones e indulgencias. Cuando ve a sus hijos que llaman a la puerta, Él la abre de para en par con alegría.  Jubileo es el júbilo del Espíritu hasta rebosar.  Jubileo es como un pequeño anticipo de la alegría del cielo.

8  “Es el tiempo para que la Iglesia vuelva a encontrar el sentido de la misión que el Señor le encomendó el día de Pascua: ser signo e instrumento de la misericordia del Padre (Jn 20, 21-23). Por eso el Año Santo debe mantener vivo el deseo de saber acoger los numerosos signos de la ternura que Dios ofrece al mundo entero y sobre todo a cuantos sufre, están solos y abandonados, y también sin esperanza de ser perdonados y de sentirse amados por el Padre… Esta es la razón del Jubileo: este es el tiempo de la misericordia. Es el tiempo favorable para curar las heridas, para no cansarse de encontrarse con quienes esperan ver y tocar con las manos los signos de la cercanía de Dios, para ofrecer a todos, a todos, la vía del perdón y de la reconciliación”.

9  1º.- Este Jubileo es una ocasión extraordinaria para dar fuerza y vigor a lo que constituye la vida ordinaria de la Iglesia y de todo cristiano: ser signo de la cercanía y la ternura de Dios. Es un desafío de no poca importancia en el contexto de la cultura de nuestros días. Una cultura que hace predominar el concepto de la posesión.

10  2º.- El Jubileo tiene el objetivo de recordar a cada uno la belleza de la fe, que pone en su centro el amor misericordioso del Padre hecho visible en el rostro de Cristo y sostenido por el Espíritu, que guía los pasos de los creyentes en las vicisitudes de la historia.

11  3º.- El Jubileo vuelve a proponer la fuerza de la misericordia de Dios como vía principal para dejarse reconciliar con el Padre y para redescubrir la urgencia de la solidaridad, del amor y del perdón entre los hermanos.

12  4º.- Rompiendo los esquemas precedentes, este Jubileo sitúa como contenido fundamental la “misericordia misma”. Tarea ardua en nuestros días, tan frecuentemente marcados por la violencia y por la incapacidad de perdonar. Si se quiere, es precisamente esta palabra, PERDÓN, la que sintetiza la novedad del Jubileo de la Misericordia. Un término que contiene en sí la esencia de la revelación de Jesucristo, que vino para que nos reconciliáramos con el Padre (Ef. 2, 14-18).

13 Recuerda el papa Francisco en la bula Misericordiae vultus: “Hay momentos en los que de un modo mucho más intenso estamos llamados a tener la mirada fija en la misericordia, para poder ser también nosotros mismos signo eficaz del obrar del Padre” ( MV 3). La celebración litúrgica es un momento privilegiado para poder vislumbrar y dejarse fascinar por el rosto misericordioso del Padre.

14  La palabra LITURGIA viene de una palabra griega (leiton ergon) que significa “acción”, “servicio público”. Los primeros cristianos la adoptaron para designar el culto público que daban a Dios, culto referido a la vez a lo que Dios hace por su pueblo y a la Iglesia por Dios. En un sentido más restringido, significa la celebración de los sacramentos, en particular el de la Eucaristía, llamada entonces “fracción del Pan”.

15  Lo esencial de la Liturgia es ser una celebración.  “Celebrar” es festejar”; y “festejar” es hacer fiesta, es vivir intensamente y con alegría.  La Iglesia “celebra”, “festeja” los acontecimientos de la Historia de la Salvación con ritos, signos, símbolos, palabras... que llamamos LITURGIA. Por tanto, podemos definir la Liturgia como la “celebración de nuestra fe”, como la “celebración del misterio salvador de Cristo”, del acontecimiento de Cristo.

16  una acción de Cristo, de Cristo resucitado que se hace presente en la asamblea que se reúne.

17  una acción que realizamos nosotros; una acción propia de la comunidad cristiana, de los creyentes (del pueblo cristiano entero – y no únicamente del celebrante-).

18  Cristo Jesús Único y Eterno Sacerdote.

19  La Iglesia, participa del Sacerdocio de Cristo Jesús. “Las acciones litúrgicas no son acciones privadas, sino celebraciones de la Iglesia, que es `sacramento de unidad', esto es, pueblo santo, congregado y ordenado bajo la dirección de los obispos. Por tanto, pertenecen a todo el Cuerpo de la Iglesia, influyen en él y lo manifiestan, pero afectan a cada miembro de este Cuerpo de manera diferente, según la diversidad de órdenes, funciones y participación actual" (SC 26).

20  Cristo Jesús Único y Eterno Sacerdote.  La Iglesia, participa del Sacerdocio de Cristo Jesús.  "Las acciones litúrgicas no son acciones privadas, sino celebraciones de la Iglesia, que es `sacramento de unidad', esto es, pueblo santo, congregado y ordenado bajo la dirección de los obispos. Por tanto, pertenecen a todo el Cuerpo de la Iglesia, influyen en él y lo manifiestan, pero afectan a cada miembro de este Cuerpo de manera diferente, según la diversidad de órdenes, funciones y participación actual" (SC 26).  Una misma dignidad pero una diversidad de ministerios. Pero "todos los miembros no tienen la misma función" (Rm 12,4).

21  Ministerios ordenados: escogidos y consagrados por el sacramento del Orden.  Ministerios particulares: no consagrados por el sacramento del Orden.  Los laicos que realizan su misión sacerdotal esforzándose por santificarse y por santificar su vida en la familia y en trabajo

22  Signos y símbolos: Signos del mundo de los hombres: Dios habla al hombre a través de la creación visible. Dios nos habla con los signos y símbolos de la vida social de los hombres Signos de la Alianza. Signos asumidos por Cristo. Signos sacramentales.

23  Palabras y acciones: Toda celebración sacramental es un encuentro de los hijos de Dios con su Padre, en Cristo y en el Espíritu Santo, y este encuentro se expresa como un diálogo a través de acciones y de palabras. La liturgia de la Palabra es parte integrante de las celebraciones sacramentales. Para nutrir la fe de los fieles, los signos de la Palabra de Dios deben ser puestos de relieve: el libro de la Palabra (leccionario o evangeliario), su veneración (procesión, incienso, luz), el lugar de su anuncio (ambón), su lectura audible e inteligible, la homilía del ministro, la cual prolonga su proclamación, y las respuestas de la asamblea (aclamaciones, salmos de meditación, letanías, confesión de fe...). 

24  Canto y música. El canto y la música cumplen su función de signos de una manera tanto más significativa cuanto "más estrechamente estén vinculadas a la acción litúrgica" (SC 112), según tres criterios principales: la belleza expresiva de la oración, la participación unánime de la asamblea en los momentos previstos y el carácter solemne de la celebración. Participan así de la finalidad de las palabras y de las acciones litúrgicas: la gloria de Dios y la santificación de los fieles (cf SC 112)

25  El Año litúrgico. Se llama Año Litúrgico a la organización del año como celebración progresiva del misterio de Cristo La Iglesia, en el círculo del año, desarrolla todo el misterio de Cristo, desde la Encarnación y la Navidad hasta la Ascensión, Pentecostés y la expectativa de la dichosa esperanza y venida del Señor

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27 DÍA DE LA RESURRECCIÓN DE CRISTO DÍA DE LA IGLESIA DÍA DEL HOMBRE DÍA DEL SEÑOR El Día del Señor (domingo cristiano)

28  La celebración de los Sacramentos: Bautismo, Reconciliación, Unción de enfermos, Eucaristía

29  A través de un camino mistagógico marcado por la iniciación de los signos, de los que el Rito del Bautismo es particularmente rico (pila bautismal, óleos, agua, vestidura blanca, cirio pascual, inmersión-infusión…), se tendrá cuidado de subrayar cómo el baño de regeneración, “puerta” de todos los sacramentos, introduce en la vida sacramental de la Iglesia y reviste al hombre de la imagen de Dios, que el cristiano está llamado a llevar sin mancha para la vida eterna.

30  En el Año Santo de la Misericordia asume gran relevancia el sacramento de la Reconciliación. Con Dios.  Con los hermanos.

31 * Dios, rico en amor, es quien nos da el conocimiento de los pecados. * Nos da su misericordia. * Ama la vida. * Es lleno de clemencia. * Es el Padre y nosotros vamos a su encuentro. * Es el Supremo Bien. * Es digno de ser amado sobre todas las cosas. * Reconcilió consigo al mundo por la muerte y resurrección de su Hijo. * Es quien derramó el Espíritu Santo para la remisión de los pecados, para hacernos herederos e hijos. * El concede el perdón y la paz. * Se aplaca con nuestro arrepentimiento. * Es el que nos convoca para alcanzar misericordia. * Abre nuestros ojos y mueve nuestro corazón. * Su amor reúne a los divididos por el pecado. * Es el que envió a Jesucristo. * Es el creador del hombre y el redentor. * Corrige con justicia y perdona con clemencia. * Es el autor y dueño de la luz. * Siempre es generoso para el perdón.

32 * Que se acuerde de nosotros y nos purifique para que caminemos como hijos de la luz. * Que nos purifique y nos haga ofrenda agradable. * Que nos absuelva de todos los pecados. * Que corregida nuestra vida podamos gozar de las alegría eternas. * Que abra nuestros ojos para que podamos descubrir el mal que hemos hecho. * Que mueva nuestro corazón para convertirnos a él. * Que nos sane y robustezca por su fuerza. * Escuchar su palabra, confesar nuestros pecados yd ar gracias por el perdón. * Que nos conceda la gracia de una verdadera penitencia. * Que volvamos a la iglesia. * Que nos devuelva la primitiva blancura del bautismo. * Recibir con alegría y mantener con una vida santa los frutos del perdón. * Le damos gracias por su misericordia. * Sentir el temor de su piedad y que tengamos fe en el corazón, justica en las obras, piedad en la conducta, verdad en los labios y disciplina en las costumbres.

33 * Merecer la vida inmortal. * Que conservemos siempre los bienes que recibimos. * Que nos levantemos cada vez que caemos en el pecado. * Que no nos falte la fortaleza de la perseverancia. * Que nos perdonemos siempre unos a otros, y que trabajemos todos juntos por la paz del mundo.

34 * Contrición. * Confesión. * Satisfacción. * Absolución.

35  La celebración del sacramento de la Penitencia es siempre una acción en la que la Iglesia proclama su fe, da gracias a Dios por la libertad con que Cristo nos liberó y ofrece su vida como sacrificio espiritual en alabanza de la gloria de Dios y sale al encuentro de Cristo que se acerca.

36 * Preparación y acogida del penitente. * Proclamación de la Palabra de Dios * Confesión de los pecados. * Imposición de manos y absolución. *Acción de gracias.

37  Toda la Iglesia podrá encontrar en este Jubileo la alegría para redescubrir y hacer más fecunda la misericordia de Dios, con la cual todos estamos llamados a dar consolación a cada hombre y cada mujer de nuestro tiempo. En la Unción de enfermos, administrada con particular solicitud a quienes se preparan para el encuentro definitivo con el Padre, subráyese principalmente la dimensión de la esperanza y de la espera de la visión beatifica de Dios, que no ha vendió a condenar, sino a perdonar.

38  La Unción de los enfermos es un “sacramento para vivir cristianamente la enfermedad” afrontada desde la gran misericordia que Dios Padre nos tiene.  Y de aquí se desprenden las siguientes notas características:

39 1ª La unción de los enfermos (como antes quizá se pensaba) no es un sacramento para los que ya están inconscientes y a punto de morir.

40 2ª La unción de los enfermos es el sacramento con el que Jesucristo se acerca a sus hermanos más débiles y por ello más amados.

41 3ª La unción de los enfermos está destinada a todos los que padecen una enfermedad grave; también a los que enfermos crónicos, a los accidentados y a los impedidos, y a aquellos que se encuentran seriamente debilitaos por los achaques de la vejez.

42 4ª La unción de los enfermos es un sacramento, una celebración de toda la comunidad cristiana.

43 5ª La unción de los enfermos es un gran signo del interés de la comunidad cristiana hacia sus miembros que sufren.

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49  La Eucaristía, “culmen y fuente” de la vida de la Iglesia, lo es con mayor razón también de todas las celebraciones y actividades que tendrán que ver con este Año Santo extraordinario. La Eucaristías, en efecto, es centro de la vida sacramental y consummatio vitae spiriualis et ómnium sacramenturon finis, como enseña santo Tomás. En ella se consuma el perdón recibido en el sacramento de la reconciliación, con la participación en la comunión del cuerpo y sangre de Cristo junto a toda la comunidad de los bautizados. Eucaristía

50  La Eucaristía y el sacramento de la Reconciliación son dos sacramentos en estrecha relación. “La Eucaristía, al hacer presente el Sacrifico redentor de la Cruz, perpetuándolo sacramentalmente, significa que de ella se deriva una exigencia continua de conversión, de respuesta personal a la exhortación que san Pablo dirigía a los cristianos de Corinto: “En nombre de Cristo os suplicamos: ¡reconciliaos con Dios!“  (2 Cor 5,20).

51  En todas las diócesis y comunidades se ha de prestar particular atención a que la celebración de la Misa sea preparada en su aspecto litúrgico (signos, símbolos, gestos), para una participación consciente, activa y fructuosa de todo el pueblo de Dios, en sus distintas expresiones: niños, jóvenes, adultos, ancianos, discapacitados, encarcelados, haciendo así que cada uno se sienta interpelado de manera seria y serena por la misericordia de Dios, de la que la celebración eucarística es trasparencia. En cada diócesis, según el calendario del Jubílelo, propónganse iniciativas y celebraciones en las que se impliquen, en oración, las diversas manifestaciones del pueblo de Dios.

52  Es importante que se tenga una especial preocupación por los que viven las periferias de nuestras parroquias, sobre todo por quienes se han alejado de la Iglesia o que por distintos motivos han sido marginados. Búsquese hacer llegar también a estos el mensaje de que Dios es Padre de todos y espera a todos para que puedan ser objeto de la “indulgencia del Padre” (MV 22) y recibir el abrazo reconciliador para ser rehabilitados plenamente en la herencia que corresponde a los hijos de Dios.

53 La Peregrinación. La Puerta Santa. La “profesión de fe”. La “indulgencia jubilar”. Invitación a la “acción evangelizadora y caritativa-social”

54  Peregrinos por los caminos del mundo. La peregrinación expresa en primer lugar lo que es el mismo hombre: homo viator. El término latino “peregrinus” admite dos posibles derivaciones: per ager, que se refiere a aquel que atraviesa los campos, y per eger, que remite a aquel que atraviesa las fronteras. En un caso y en el otro, el peregrino es un forastero, un hombre en camino hacia una meta. Esto es lo que le distingue de un vagabundo, que no tiene una meta fija, sino que solo vaga permanentemente sin saber qúe busca.

55  Estamos en camino, todos, siempre y dondequiera que nos encontremos. Es un camino que para unos toma la vía de la búsqueda de la verdad, para otros el anhelo de una paz interior, y para otros el encuentro con Dios. En todo caso, es el signo de una exigencia profunda, casi innata, y de un movimiento que permite captar la profunda espiritualidad de la que somos portadores.

56  Roma. “signo peculiar del Año Santo será la peregrinación que tendrá a Roma como absoluta protagonista”; la ciudad santa y eterna se prepara para acoger a peregrinos de todo el mundo, que llegarán a sus calles para atravesar la Puerta de la Misericordia, experimentando el amor de Dios que “consuela, perdona y ofrece esperanza” (MV 3)

57  El Año Santo tendrá su centro en Roma : Cada una de las cuatro Basílicas papales de Roma: san Pedro, san Juan de Letrán, santa María la Mayor y san Pablo Extramuros, serán iglesia jubilares donde acercarse en peregrinación para obtener la indulgencia cumpliendo las condiciones establecidas. A las cuatro Basílicas papales se unen las tres iglesias que, junto a ellas, conforman la ruta tradicional de las “siete iglesias”, a saber: san Lorenzo Extramuros, Santa Cruz de Jerusalén y San Sebastián Extramuros.

58  Otros lugares. “El Jubileo será celebrado en Roma así como en las Iglesias particulares como signo visible de la comunión de toda la Iglesia” (MV 3). Por tal motivo las comunidades parroquiales, colegios, instituciones de apostolado laico, movimientos, etc… pueden organizar visitas a una Iglesia Jubilar de acuerdo a criterios de cercanía u otros motivos.

59  El Santo Padre Francisco, en la Bula Misericordiae Vultus ha establecido que el Año Santo se abrirá el 8 de diciembre de 2015, solemnidad de la Inmaculada Concepción de la Virgen María, con la apertura de la PUERTA SANTA de la Basílica de San Pedro en el Vaticano. Esta puerta se abre solamente en los años jubilares y permanece cerrada, sellada y tapiada en los demás años.

60  El domingo siguiente, III de Adviento, se abrirá la Puerta santa en la Catedral de Roma, la Basílica de San Juan de Letrán.  Sucesivamente se abrirá la Puerta Santa en las otras Basílicas Papales.  Además el Santo Padre ha establecido que “en cada Iglesia particular (= diócesis), en la catedral, que es la Iglesia Madre para todos los fieles, o en la concatedral o en una iglesia de significado especial se abra todo el Año Santo una idéntica Puerta de la Misericordia.  A juicio del Ordinario (= Obispo), ella podrá ser abierta también en los santuarios, meta de tantos peregrinos que en estos lugares santos con frecuencia son tocados en el corazón por la gracia y encuentran el camino de la conversión” (M V 3).

61  Atravesando la Puerta Santa, el peregrino entra la basílica o lugar jubilar. Al acercarse al altar o dentro de la celebración litúrgica en la que se participe, el peregrino está llamado a recitar la “profesión de fe” (el CREDO). Se trata de un signo que debemos comprender bien en su profundidad teológica y en el valor que posee para la vida cristiana.

62 “Vivir la indulgencia en el Año Santo significa acercarse a la misericordia del Padre con la certeza que su perdón se extiende sobre toda la vida del creyente. Indulgencia es experimentar la santidad de la Iglesia que participa a todos de los beneficios de la redención de Cristo, para que el perdón sea extendido hasta las extremas consecuencias a la cual llega el amor de Dios. Vivamos intensamente el Jubileo pidiendo al Padre el perdón de los pecados y la dispensación de su indulgencia misericordiosa”. (Misericordiae vultus, n. 22)

63  ¿Qué son las indulgencias? La indulgencia es la remisión de la pena temporal debida por los pecados ya perdonados (en cuanto a la culpa) que un fiel, consigue por mediación de la Iglesia. Como administradora de la redención la Iglesia distribuye y aplica el tesoro de las satisfacciones de Cristo y de los santos sobre los fieles bien dispuestos que cumplen determinadas condiciones. La indulgencia es parcial o plenaria según libre de la pena temporal debida por los pecados en parte o totalmente. Todo fiel puede “recibir” para si mismo o aplicar por los difuntos, a manera de sufragio, las indulgencias tanto parciales como plenarias.

64 Condiciones generales para “recibir” indulgencias. Para ser capaz de “recibir” indulgencias es necesario estar bautizado, no excomulgado y hallarse en estado de gracia santificante por lo menos al final de las obras prescritas. Para “recibir” efectivamente indulgencias, además de ser sujeto capaz, se debe tener: o al menos intención de conseguirlas, o cumplir las obras prescritas dentro del tiempo determinado, y de la manera debida, según el tenor de la concesión.

65  Requisitos especiales para recibir indulgencia plenaria Ejecución de la obra enriquecida con la indulgencia. Excepto en caso de muerte, solo se puede ganar una indulgencia plenaria al día. Confesión sacramental, comunión eucarística y rezar por las intenciones del Papa (Padrenuestro y Ave maría, u otras oraciones distintas según la devoción del fiel). Aunque pueden cumplirse algunos días antes o después de la ejecución de la obra prescrita, es conveniente que la comunión y la oración par las intenciones del Papa, se realicen el mismo día en que se haga la obra. Con una sola confesión se pueden ganar varias indulgencias plenarias. La comunión tiene que ser una por cada vez. Exclusión de todo afecto al pecado, incluso venial.

66 Algunas obras enriquecidas con INDULGENCIA PLENARIA. Adoración al Santísimo Sacramento, al menos durante media hora. Bendición apostólica para el momento de la muerte. La Primera Comunión o asistir a ella recibiendo piadosamente la Sagrada Eucaristía. Rezo del Santo Rosario en una Iglesia, en un oratorio o en familia. Lectura espiritual de la Sagrada Escritura al menos durante media hora. Ejercicio del Vía Crucis, recorriendo las 14 estaciones (erigidas) y meditando la pasión y muerte del Señor. Los enfermos o impedidos pueden simplemente leer y meditar cada una de las estaciones.

67 “En la misericordia tenemos la prueba de cómo Dios ama. Él da todo sí mismo, por siempre, gratuitamente y sin pedir nada a cambio. Viene en nuestra ayuda cuando lo invocamos. Es bello que la oración cotidiana de la Iglesia inicie con estas palabras: « Dios mío, ven en mi auxilio; Señor, date prisa en socorrerme » (Sal 70,2).” (MV 14).

68  Invitación a la acción evangelizadora en la perspectiva de la exhortación apostólica Evangelii Gaudium: 1- Las obras de misericordia espirituales y corporales (n. 15) deben redescubrirse en la predicación, en la catequesis, en la acción litúrgica y sociocaritativa… 2- Íntima e indisoluble relación entre la justicia y la misericordia. 3- Vivir la experiencia de la misericordia (n. 22) con el sacramento de la penitencia y con el don de la indulgencia del Jubileo. 4- La misericordia es la actitud cotidiana de quien se sabe fruto de su misericordia entrañable.

69  El Papa Francisco ha tenido la intuición de convocar ahora un Jubileo extraordinario para celebrar la Misericordia de Dios. A diferencia de los Jubileos anteriores, no conmemoramos tanto un aniversario concreto, cuanto que proclamamos que Dios es bueno, infinitamente bueno; es decir, misericordioso. ¡Nada más y nada menos!.

70  Recordamos esperanzadamente que hemos sido creados a imagen y semejanza suya, y que por lo tanto estamos llamados a ser misericordiosos. De ahí el lema de este Año Jubilar: “Sed misericordiosos como vuestro Padre es misericordioso”. De los hijos se espera que sean como el Padre. Lo contrario sería una traición hacia Él, además de una desgracia para nosotros.

71  La misericordia es un don de Dios, y al mismo tiempo una llamada a nuestra conversión. La misericordia de Dios no estriba tanto en “tapar” nuestro pecado, cuanto en realizar en nosotros el milagro de la transformación interior. O dicho con otras palabras, la bondad de Dios no consiste solo en tener paciencia con nuestro pecado, sino en santificarnos. Este es el motivo por el que el sacramento de la Reconciliación ocupa un lugar central en la celebración del Jubileo.

72  En conclusión: la verdadera misericordia es la que nos lleva a la propia conversión, al mismo tiempo que nos conduce a tener paciencia con el prójimo. He aquí un buen propósito para este Año Jubilar: ¡Sé exigente contigo mismo, y paciente con los demás!.

73  Este Jubileo nos ofrece  Este Jubileo nos ofrece la posibilidad de vivir una experiencia de misericordia con los pobres, con los prófugos, con los enfermos, con los refugiados, con los presos, en las misiones, etc…  ¡Participemos en esas experiencias de misericordia!

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