ADELANTE, ADELANTE Adelante en la batallla, Cristo es el capitán, Él nos lleva por el triunfo, de la vida espiritual.

1 2 ...
Author: Margarita Piñeiro de la Fuente
0 downloads 2 Views

1

2

3

4

5

6

7

8 ADELANTE, ADELANTE Adelante en la batallla, Cristo es el capitán, Él nos lleva por el triunfo, de la vida espiritual.

9 Adelante en la lucha Contra el mundo del pecar. Es muy grande el enemigo, Pero Cristo es sin igual.

10 Coro: hombres...…..Adelante, adelante, mujeres …….La fe siempre alimenta, Si es que quieres vencer. Si es que quieres vencer. Hombres...…..Adelante, adelante, mujeres ……......Valor se necesita, Para poder vencer. Para poder vencer.

11 Aunque mires a tu lado, enemigos por doquier, Mira a Cristo el refugio, que te hará salir con bien.

12 Adelante, no desmayes, lucha siempre sin temor, Satanás es muy astuto, Pero Cristo le venció.

13 Coro: hombres...…..Adelante, adelante, mujeres …….La fe siempre alimenta, Si es que quieres vencer. Si es que quieres vencer. Hombres...…..Adelante, adelante, mujeres ……......Valor se necesita, Para poder vencer. Para poder vencer.

14 Adelante siempre lucha Con valor y decisión, Cristo siempre está a tu lado, Él será tu protección.

15 Adelante siempre lucha Con valor y decisión, Cristo siempre está a tu lado, Él será tu protección.

16 Coro: hombres...…..Adelante, adelante, mujeres …….La fe siempre alimenta, Si es que quieres vencer. Si es que quieres vencer. Hombres...…..Adelante, adelante, mujeres ……......Valor se necesita, Para poder vencer. Para poder vencer.

17 MIRARTE SÓLO A TI, SEÑOR Mirarte sólo a Ti, Señor. Y no mirar atrás.

18 Coro Seguir tu caminar, Señor. Seguir sin desmayar, Señor. Postrarme ante tu altar, Señor. Y no mirar atrás.

19 Amarte sólo a ti, Señor. Y no mirar atrás.

20 Coro Seguir tu caminar, Señor. Seguir sin desmayar, Señor. Postrarme ante tu altar, Señor. Y no mirar atrás.

21 Servirte sólo a ti, Señor. Y no mirar atrás.

22 Coro Seguir tu caminar, Señor. Seguir sin desmayar, Señor. Postrarme ante tu altar, Señor. Y no mirar atrás.

23 Hoy concluimos con las Bienaventuranzas Hermanos y amigos hoy miércoles 12 de Marzo para todo el mundo la radio www.cristomifortaleza.com www.cristomifortaleza.com en vivo con el programa buscando a Jesús sintonízanos. ¡comenta ! Hora centro 5:00Pm Hermanos y amigos Búscanos http://www.youtube.com/my_videos?o=U http://www.youtube.com/my_videos?o=U

24 Bienaventurados los que padecen persecución por causa de la justicia (Mt. 5:10- 12) - INTRODUCCIÓN Abran su Biblia por favor en Mateo 5:10-12: “Bienaventurados los que padecen persecución por causa de la justicia, porque de ellos es el reino de los cielos. Bienaventurados sois cuando por mi causa os vituperen y os persigan, y digan toda clase de mal contra vosotros, mintiendo. Gozaos y alegraos, porque vuestro galardón es grande en los cielos; porque así persiguieron a los profetas que fueron antes de vosotros.” Esta es la última bienaventuranza que Jesús da en el sermón del monte. Es sin duda una bienaventuranza muy resaltada, a diferencia de las otras 7, con tres versículos. Es decir, Dios subrayó esta bienaventuranza. ¿Cómo lo sabemos? Bueno, recuerden que en la Escritura no existen los textos en “negritas” ni tampoco los textos “subrayados”. Pero la forma de resaltar una porción es repitiendo el texto exactamente o diciendo lo mismo pero con diferentes palabras. Por ejemplo: Mt. 24:23-26: “Entonces, si alguno os dijere: Mirad, aquí está el Cristo, o mirad, allí está, no lo creáis. Porque se levantarán falsos Cristos, y falsos profetas, y harán grandes señales y prodigios, de tal manera que engañarán, si fuere posible, aun a los escogidos. Ya os lo he dicho antes. Así que, si os dijeren: Mirad, está en el desierto, no salgáis; o mirad, está en los aposentos, no lo creáis”. Está resaltando que no creamos cuando alguien nos dijere “mirad, ahí está el Cristo”. Lo dice dos veces con diferentes palabras, pero se refiere a lo mismo. También como ejemplo, podemos ver en el evangelio según Juan la expresión “ De cierto, de cierto os digo” en 25 ocasiones. Y las 25 ocasiones contienen afirmaciones absolutas, Jesús remarcó estas afirmaciones y expresiones, por ejemplo: Jn. 14:38: “Jesús le respondió: ¿Tu vida pondrás por mí? De cierto, de cierto te digo: No cantará el gallo, sin que me hayas negado tres veces”. No le dejó lugar a duda a Pedro, se lo dijo y tal cual sucedió. Entonces, volviendo a nuestro texto en Mt. 5:10-12. Encontramos persecución, persigan, persiguieron. Encontramos Bienaventurados, gozaos y alegraos.

25 El versículo 10 está expresando la bienaventuranza de forma general. “Bienaventurados los que...”, lo hace como todas las bienaventuranzas anteriores. Pero el versículo 11 cambia completamente, porque lo aplica de forma personal: “Bienaventurados sois...”. En esta bienaventuranza, Jesús decide no solo hablar de forma general, sino que lo dirige ahora a cada oyente. Al mismo tiempo, encontramos la bendición de la bienaventuranza: “...porque de ellos es el reino de los cielos” y en el versículo 12: “Gozaos y alegraos, porque vuestro galardón es grande en los cielos”. Ninguna de las otras bienaventuranzas trae este galardón. Todas traen una bendición, pero solo a esta le es agregado un galardón, una recompensa además de la bendición propia de la bienaventuranza. Así pues, trataremos de ver y explicar los siguientes puntos: I. Bienaventurados los que padecen persecución por causa de la justicia II. Bienaventurados sois cuando por mi causa os vituperen y os persigan III. Digan toda clase de mal contra vosotros, mintiendo IV. Gozaos y alegraos V. Así persiguieron a los profetas I. Bienaventurados los que padecen persecución por causa de la justicia Vamos primero entendiendo qué es padecer persecución, porque puede que no entendamos qué es exactamente. Originalmente no hay dos palabras, es una sola palabra y significa: perseguir. De hecho en la versión Dios Habla Hoy dice: “Dichosos los perseguidos por hacer lo que es justo”. Es decir, la idea primaria se refiere a ser perseguidos. Esto nos debe quedar claro porque una cosa son los conflictos que tenemos a diario como toda persona en este mundo y otra muy diferente es ser perseguido por causa de la justicia divina. Veamos en Mt. 10:22-23: “Y seréis aborrecidos de todos por causa de mi nombre; mas el que persevere hasta el fin, éste será salvo. Cuando os persigan en esta ciudad, huid a la otra; porque de cierto os digo, que no acabaréis de recorrer todas las ciudades de Israel, antes que venga el Hijo del Hombre.” Lucas. 11:49: “Por eso la sabiduría de Dios también dijo: Les enviaré profetas y apóstoles; y de ellos, a unos matarán y a otros perseguirán”. Lucas. 21:12: “Pero antes de todas estas cosas os echarán mano, y os perseguirán, y os entregarán a las sinagogas y a las cárceles, y seréis llevados ante reyes y ante gobernadores por causa de mi nombre.”. Las Bienaventuranzas

26 (Como cristianos, deberíamos añadir a nuestro listado de promesas todas estas que hablan de persecución) El ser perseguidos, continuamente aparece en contexto con ser despreciados por este mundo y, con la intención de hasta llegar a ser asesinados, encarcelados por causa de la justicia. De hecho. Para que nos quede un poco más claro, el apóstol Pablo, antes de ser llamado por el Señor Jesús se dedicaba a esta tarea de perseguir a los cristianos. Hechos. 9:1 “Saulo, respirando aún amenazas y muerte contra los discípulos del Señor, vino al sumo sacerdote”, Hechos. 9:5: “Él dijo: ¿Quién eres, Señor? Y le dijo: Yo soy Jesús, a quien tú persigues; dura cosa te es dar coces contra el aguijón.” La persecución por causa de la justicia de Dios es una bendición, es una bienaventuranza. Pero en el contexto de la justicia de Dios. Porque tú puedes ser perseguido por delitos y crímenes que has cometido y eso no es una bendición, ni una bienaventuranza. Menciono esto porque hay gente que de repente podría pensar esto. Llegan a la iglesia, escuchan un mensaje, comienzan a asistir regularmente y, en algún momento, sus pecados del pasado vienen a cobrarle las consecuencias y creen que esto es padecer por causa del nombre de Jesús, cuando en realidad no es así. Esta justicia por la cual debemos padecer, es la misma de la que habla la cuarta bienaventuranza: “Bienaventurados los que tienen hambre y sed de justicia”. Veíamos que esta justicia es la rectitud demandada por Dios, la cual nadie puede lograr si no es a través de Jesucristo, por medio de la fe en su sacrificio o, en otras palabras, el evangelio. II. Bienaventurados sois cuando por mi causa os vituperen y os persigan Vamos ahora de lo general a lo personal, como lo aplicó Jesús. Por un momento piensa de esta forma: “Bienaventurado eres cuando por causa de Jesucristo te vituperen y te persigan”. Veamos qué significa vituperar: difamar, i.e. atacar a, molestar, acosar; reprochar, insultar, injuriar injustamente. Básicamente eso es el significado de vituperar. La semana pasada veíamos a los pacificadores, aquellos que van proclamando el evangelio y llevando a los hombres a hacer la paz con Dios, mediante el sacrificio de Jesús derramado en la cruz. Pero, al mismo tiempo que el pacificador lleva ese mensaje, también se producen problemas y es expuesto a ser vituperado y perseguido. En estos días, el evangelio ha padecido una reducción de su significado en nombre del “amor” y carece de esta persecución. Y tenemos iglesias llenas de personas convertidas no al evangelio de Jesucristo, no a la causa de Jesucristo, sino convertidas a un evangelio creado en su propio pensamiento conforme a su conveniencia. Un evangelio que ya no es poder para salvación, sino poder para sacar el campeón que llevas dentro, poder para explotar tu potencial, poder para triunfar en la vida, poder para ser próspero, poder para cientos de cosas que ni se acercan a lo que en verdad tiene poder el evangelio. Poder para salvación. Esto es un evangelio diluido, esto es un evangelio que ya no es motivo de Las Bienaventuranzas

27 vituperaciones y persecuciones, porque hablan y apelan al orgullo y la integridad del hombre y no, a la gloria, la justicia y la santidad de Dios. Ro. 1:16 “Porque no me avergüenzo del evangelio, porque es poder de Dios para salvación a todo aquel que cree”. Si tu llevas el mensaje de Jesús, si tu proclamas el evangelio conforme a Jesús, si tu vas proclamando que el mundo necesita arrepentirse y creer en el evangelio, seguramente serás expuesto a ser vituperado y perseguido. Esa es la causa. Ese es el privilegio. Fil. 1:29 “Porque a vosotros os es concedido a causa de Cristo, no sólo que creáis en él, sino también que padezcáis por él”. 2 Ti. 3:12 “Y también todos los que quieren vivir piadosamente en Cristo Jesús padecerán persecución”. Jn. 15:20 “Acordaos de la palabra que yo os he dicho: El siervo no es mayor que su señor. Si a mí me han perseguido, también a vosotros os perseguirán; si han guardado mi palabra, también guardarán la vuestra.” ¿Estás padeciendo o estás callado? ¿Estás siendo perseguido o no proclamas el evangelio? III. Digan toda clase de mal contra vosotros, mintiendo No podemos leer el versículo 11 ignorando lo que dice al final: mintiendo. Hace algunas enseñanzas les comentaba que a Jesús y a sus discípulos se les acusaba de todo, menos de hipócritas. El problema no es lo que habla la gente de ti, el problema no es cómo te califican, el problema es si lo que hablan de ti es verdad. Hch. 6:10 “Pero no podían resistir a la sabiduría y al Espíritu con que hablaba. Entonces sobornaron a unos para que dijesen que le habían oído hablar palabras blasfemas contra Moisés y contra Dios”. Mt. 26:59-61 ”Y los principales sacerdotes y los ancianos y todo el concilio, buscaban falso testimonio contra Jesús, para entregarle a la muerte, y no lo hallaron, aunque muchos testigos falsos se presentaban. Pero al fin vinieron dos testigos falsos, que dijeron: Este dijo: Puedo derribar el templo de Dios, y en tres días reedificarlo”. Las Bienaventuranzas

28 Si hablan y dicen toda clase de mal contra ti, y están mintiendo, entonces eres bienaventurado, pero si dicen la verdad acerca de ti, entonces puede que no estés siendo sincero y que quizá solo tengas una pantalla, solo tengas una imagen externa. IV. Gozaos y alegraos “Gozaos y alegraos, porque vuestro galardón es grande en los cielos”. Aquí viene la diferencia con las otras bienaventuranzas. Además de ser bienaventurados, aquí dice que hay un galardón grande en los cielos. Un galardón. Significa: paga por servicios (literalmente o figurativamente); recompensa. Esto es lo que significa galardón. 1 Co. 9:18 “¿Cuál, pues, es mi galardón? Que predicando el evangelio, presente gratuitamente el evangelio de Cristo, para no abusar de mi derecho en el evangelio”. Hay un galardón que Dios otorga a los que han padecido persecución y aún más, a los que han sido asesinados por causa del evangelio. No sabemos exactamente qué es ese galardón, pero ahí está. Es una promesa. Ap. 20:4 “Y vi tronos, y se sentaron sobre ellos los que recibieron facultad de juzgar; y vi las almas de los decapitados por causa del testimonio de Jesús y por la palabra de Dios, los que no habían adorado a la bestia ni a su imagen, y que no recibieron la marca en sus frentes ni en sus manos; y vivieron y reinaron con Cristo mil años”. V. Así persiguieron a los profetas ¿Por qué persiguieron a los profetas de Dios? Bueno, pues el mensaje que traían no le agradaba a la gente. Is. 1:9 “Si Jehová de los ejércitos no nos hubiese dejado un resto pequeño, como Sodoma fuéramos, y semejantes a Gomorra” Is. 3:9: “La apariencia de sus rostros testifica contra ellos; porque como Sodoma publican su pecado, no lo disimulan. ¡Ay del alma de ellos! porque amontonaron mal para sí.” Isaías comparando a Jerusalén con Sodoma y Gomorra. La tradición dice que aserrado bajo el reinado del impío Manasés. Su mensaje vino a caer mal a más de alguno. Jeremías. En su tiempo, había falsos profetas, como el día de hoy abundan. Las Bienaventuranzas

29 Jer. 23:17 “Dicen atrevidamente a los que me irritan: Jehová dijo: Paz tendréis; y a cualquiera que anda tras la obstinación de su corazón, dicen: No vendrá mal sobre vosotros” Esta era la profecía que traían estos falsos profetas. El pueblo hundido en la maldad y el pecado, y los supuestos profetas poniéndole más leña al fuego. Jer. 23:21: “No envié yo aquellos profetas, pero ellos corrían; yo no les hablé, mas ellos profetizaban. Pero si ellos hubieran estado en mi secreto, habrían hecho oír mis palabras a mi pueblo, y lo habrían hecho volver de su mal camino, y de la maldad de sus obras”. Jer. 23: 20: “Por tanto, he aquí que yo estoy contra los profetas, dice Jehová, que hurtan mis palabras cada uno de su más cercano. Dice Jehová: He aquí que yo estoy contra los profetas que endulzan sus lenguas y dicen: El ha dicho”. Y veamos el cambio en la profecía de Jeremías, el verdadero mensaje. Jer. 23:33 “Y cuando te preguntare este pueblo, o el profeta, o el sacerdote, diciendo: ¿Cuál es la profecía de Jehová? les dirás: Esta es la profecía: Os dejaré, ha dicho Jehová” Jer. 23:39: “por tanto, he aquí que yo os echaré en olvido, y arrancaré de mi presencia a vosotros y a la ciudad que di a vosotros y a vuestros padres;” En Hch. 7:52. Esteban, el primer mártir habla acerca de esto: “¿A cuál de los profetas no persiguieron vuestros padres? Y mataron a los que anunciaron de antemano la venida del Justo, de quien vosotros ahora habéis sido entregadores y matadores”. Conclusión El mensaje del evangelio de la paz, el mensaje que Jesús nos llamó a predicar es un mensaje poderoso para salvar a las personas. Es poder para salvación. Dicho mensaje traerá consigo mismo persecución y vituperaciones, pero hay un galardón otorgado a aquellos que están dispuestos a padecer por causa de su nombre. El mensaje no será del todo bien recibido por todos, porque es un mensaje totalmente radical y diferente a lo que hoy se ve en la sociedad, donde abunda el orgullo y la altivez, el pecado y la maldad; o entre la religiosidad, donde abunda la justicia propia y la autocompasión. Con todo, debemos estar dispuestos a llevar el mensaje de salvación a toda criatura, a predicar que es necesario arrepentirse y creer en el único evangelio que tiene poder para salvar y transformar la vida de las personas. Gracias hermanos y amigos por su amable atención, Dios les bendiga………………………….fin..Bienaventurados seamos todos Las Bienaventuranzas

30 Puedo Confiar En El Señor // Puedo confiar En el Señor, No me va A fallar. //

31 Si el sol llegare A obscurecer, Y no brillare nunca más, Puedo Confiar En El Señor

32 Yo igual confío En el Señor, No me va a fallar. Puedo Confiar En El Señor

33 // Puedo descansar (hombres) Puedo descansar (mujeres) // Puedo Confiar En El Señor

34 Que a su mansión (hombres) Que a su mansión (mujeres). Puedo Confiar En El Señor

35 Cristo me guiará (hombres). Cristo me guiará (mujeres). Puedo Confiar En El Señor

36 Si el sol llegare A obscurecer, Y no brillare nunca más, Puedo Confiar En El Señor

37 Yo igual confío En el Señor, No me va a fallar. Puedo Confiar En El Señor

38 // Puedo descansar (hombres) Puedo descansar (mujeres) // Puedo Confiar En El Señor

39 Que a su mansión (hombres) Que a su mansión (mujeres). Puedo Confiar En El Señor

40 Cristo me guiará (hombres). Cristo me guiará (mujeres). Puedo Confiar En El Señor