1 Procedimiento práctico para orientar un edificio. x A x' Procedimiento práctico para orientar un edificio. En un terreno bien nivelado se planta una estaca vertical (A), alrededor de la cual, sirviéndose de un cordel como compás, se trazaba un círculo, lo bastante grande como para que la sombra de la estaca pudiera tocarlo con la punta a una hora matinal (E) y a la hora vespertina correspondiente (O). Estos dos puntos, E y O, se marcaban también con estacas, y, tomando cada estaca como centro, se trazaban dos nuevos arcos de círculo de la misma curvatura, cuyas intersecciones dibujaban el “pez” que daba exactamente la dirección del mediodía, siguiendo una línea (NS) que pasaba por el centro del círculo principal. Al dibujar dos nuevos arcos de círculo a partir de las intersecciones (x, x’ ) de la línea norte-sur y del círculo, se obtenía una segunda línea, la dirección oeste-este (que pasaba por el punto donde se había clavado la primitiva estaca A), y por consiguiente la cruz de los ejes, lo que permitía establecer los ángulos del edificio. Por tanto, el proceso de orientación consiste esencialmente en deducir del círculo, que representa la eclíptica (círculo máximo de la esfera celeste que señala el curso aparente del Sol durante el año), el rectángulo del edificio sagrado, por medio de la cruz de los ejes del cielo. Si se considera el círculo como la huella visible del tiempo, la “coagulación” del círculo en rectángulo representa la transformación del tiempo en un “espacio” espiritual. Esto corresponde al símbolo de la Jerusalén celeste, que, al final de los tiempos, descenderá del cielo en la forma de un cubo perfecto. Titus Burckhardt.
2 Fachada occidental de Chartres con las torres según un grabado de 1867.La torre norte o campanario nuevo presenta una base románica coronada por un campanario gótico flamígero. La torre sur se construyó enteramente en el siglo XII. torre sur
3 Planta de la catedral de Chartres.Diseñada ad quadratum. Por primera vez se ve progresar al mismo paso, a pesar de su anchura diferente, a los tramos de las tres naves (central y laterales).
4 Catedral de Saint-Julien de Le Mans. Portal sur. Derrame de la derechaCatedral de Saint-Julien de Le Mans. Portal sur. Derrame de la derecha. Ca Titus Burckhardt indicó que Le Mans está emparentada con el Pórtico Real de Chartres, pero en Le Mans el porche se diferencia claramente del cuerpo del edificio. Además, las figuras de las jambas situadas más hacia el exterior, representan a personajes del AT, es decir, de la Antigua Alianza, mientras que las jambas junto a la puerta representan apóstoles (como relieves), es decir, personajes del NT o de la Nueva Alianza, entendidos como pilares de la Iglesia. En una y otra catedral, las figuras alusivas al AT hay que interpretarlas, pues, como pilares o soportes de la Revelación posterior.
5 Titus Burckhardt ha señalado (1962) que para subrayar la pertenencia de los profetas y de los patriarcas al cuerpo de la Jerusalén celeste, se cierne sobre sus cabezas una pequeña construcción coronada de torrecillas (jambas de las portadas laterales).
6 Pórtico Real. Portada dcha, derrame izqPórtico Real. Portada dcha, derrame izq. Titus Burckhardt ha señalado (1962) que para subrayar la pertenencia de los profetas y de los patriarcas al cuerpo de la Jerusalén celeste, se cierne sobre sus cabezas una pequeña construcción coronada de torrecillas (jambas de las portadas laterales). Los pies de estas figuras de las dos portadas laterales reposan sobre cálices de flores o bien están oprimiendo a monstruos (fuerzas del mal y de la pasión). Pórtico Real. Portada dcha, derrame dcha.
7 Pórtico Real. Portada surPórtico Real. Portada sur. Friso superior: Presentación de Jesús en el Templo, con Simeón a la izq y la Virgen a la dcha. Friso inferior: Anunciación, Visitación, Natividad y Anunciación a los pastores. T. Burckhardt ha señalado cómo en la imagen de la noche de Navidad se ve a María tendida en una especie de alcoba: una mesa la recubre como un dosel, y sobre esta mesa (que representa el pesebre) se encuentra el Niño recostado sobre una canasta. La mesa también representa el altar sobre el cual el cuerpo de Cristo es ofrecido en sacrificio. Esta mesa se corresponde con el altar del friso superior. La Madre en reposo (abajo), el altar del Templo (en medio) y la Virgen con el Niño (arriba).
8 Pórtico Real. Portada surPórtico Real. Portada sur. Titus Burckhardt continúa señalando cómo la Santísima Virgen es a la vez fundamento (abajo), altar (en medio) y trono (arriba) de la Revelación de Dios hecho hombre. Tanto la Madre en reposo, como el altar del Templo, como la Virgen entronizada con el Niño están en el mismo eje vertical del centro del tímpano, pues se trata por tres veces del misterio. Absoluta maestría en representar las verdades teológicas de la Fe mediante la geometría de las imágenes. La Madre tendida significa el don confiado con el que la Virgen se adhiere a la voluntad de Dios, convirtiéndose así en la causa “material” de la Salvación. Pura y total receptividad a la Gracia divina.
9 Pórtico Real. Portada surPórtico Real. Portada sur. Titus Burckhardt continúa señalando cómo en el registro central, la Madre, tendiendo el Niño al sacerdote, se ofrece a sí misma en sacrificio en la forma de su Hijo, tal como también debe darse el alma. En cuanto a la Reina del cielo del registro superior, está inscrita en un círculo que engloba en su seno al Niño, que también está rodeado por un círculo menor: la naturaleza de la Madre engloba a la del Hijo, y el alma, llegada al verdadero conocimiento, esconde en lo más profundo de sí misma la chispa divina, Emmanuel.
10 Chartres. Pórtico Real. Portada izq. Ascensión del SeñorChartres. Pórtico Real. Portada izq. Ascensión del Señor. Dos filas de arquivoltas: signos del zodíaco, menos Piscis y Géminis (que están en la portada dcha). Formando parte de las estrellas fijas, los signos zodiacales participan de la representación del reino del Espíritu divino, al que está consagrada esta Portada de la Ascensión, pero según una concepción antigua, los planetas rigen el mundo del alma, y María es el alma humana en toda su perfección. La presencia de los signos del zodíaco da a las arquivoltas que enmarcan la Ascensión los rasgos de la bóveda celeste; cada signo corresponde a un mes, representado por las diversas labores del campo. Las imágenes de los meses del año son los reflejos terrestres de los doce signos zodiacales.
11 Chartres. Pórtico Real. Portada izq. Ascensión del SeñorChartres. Pórtico Real. Portada izq. Ascensión del Señor. Desde las alturas en las que se cierne Cristo, se ve un grupo de ángeles que se lanzan como rayos surgidos de una nube tempestuosa sobre los discípulos del dintel.
12 Pórtico Real. Portada central. TímpanoPórtico Real. Portada central. Tímpano. Representación equilibrada de Cristo. Sea cual sea la forma geométrica en la que pudiera inscribirse este tímpano, estaría en armonía con la disposición de los cinco personajes (Pantocrátor + Tetramorfos) y la onda de movimiento que parte del centro y vuelve a él. Las cuatro formas alrededor de la mandorla, que se separan y se juntan como en una respiración, comunican a la escena toda su vida.
13 Pórtico Real. Portada central. TímpanoPórtico Real. Portada central. Tímpano. Unos ángeles rodean al Pantocrátor; en las dos arquivoltas exteriores, los 24 ancianos del Apocalipsis dirigen su mirada hacia Él. En el dintel, los doce apóstoles, en grupos de tres, flanqueados, quizás, por Enoc y por Elías, que deben regresar al final de los tiempos.
14 Pórtico Real. Portada surPórtico Real. Portada sur. Lectura que hace Titus Burckhardt del Trivium en esta portada: la Gramática como una mujer que con una vara amenaza a dos niños, Prisciano y Donato, que están debajo escribiendo; la Retórica y Cicerón; la Dialéctica y Aristóteles.
15 Pórtico Real. Portada surPórtico Real. Portada sur. Para Titus Burckhradt, también cada arte del Quadrivium se representa como una alegoría, con los rasgos de una mujer, acompañada de un signo distintivo y escoltada por un científico: la Aritmética, que hace referencia al número (tabla de cálculo + Boecio); la Música, que se refiere al tiempo (campanillas + Pitágoras); la Geometría, referida al espacio (tabla de dibujo + Euclides); la Astronomía, referida al movimiento (observa el cielo + Ptolomeo).
16 Chartres. Pórtico Real. Portada dcha (sur). Portada de la EncarnaciónChartres. Pórtico Real. Portada dcha (sur). Portada de la Encarnación. Arquivoltas de la izq. Representación de las Siete Artes Liberales (Trivium y Quadrivium). En la imagen se ve lo siguiente de la arquivolta más exterior: abajo, Aristóteles, que acompaña a la figura de arriba, la Dialéctica, representada como una mujer con un escorpión. Encima de la Dialéctica, Cicerón, que acompaña a la alegoría superior, la Retórica.
17 A la izq, de abajo hacia arriba: Aristóteles, la Dialéctica (o Lógica) y Cicerón.Debajo, a la izq, inclinado sobre un ábaco: Pitágoras. Encima: la Música (a la izq, con campanillas) y la Gramática (a la dcha, castigando a dos alumnos). Tercer nivel: un ángel vecino con Ptolomeo (dcha).
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19 Pórtico Real. Portada izqPórtico Real. Portada izq. Arquivoltas mostrando los meses del año (cada mes representado por las diversas labores del campo) y los signos del zodíaco.
20 Interior de la mezquita aljama de Isfahan (Ispahan), en Irán, denominada Masyid-i-Yuma o Mezquita del viernes. Fue construida entre los siglos VIII y XVII. Perteneciente al gran Imperio Seljúcida (Selyúcida). Algunas de sus cúpulas y de sus espacios abovedados con nervaduras, influyeron, según Titus Burckhardt, en la bóveda de crucería gótica del Occidente cristiano. También influyó en la bóveda de crucería gótica, según el mismo estudioso, la bóveda califal del siglo X (con nervios que no se cruzan en el centro), tal como la vemos en la mezquita de Córdoba.
21 Interior de la mezquita aljama de Isfahan (Ispahan), en Irán, denominada Masyid-i-Yuma o Mezquita del viernes. Fue construida entre los siglos VIII y XVII.
22 Cúpula nordeste (1088) de la mezquita aljama de Isfahan (Ispahan), en Irán, denominada Masyid-i-Yuma.
23 Mezquita de Córdoba. Bóveda delante del mihrab, en la maqsura (ejemplo de bóveda califal). 961-976.
24 Bóveda de la mezquita de Bab al-Mardum, en Toledo, hoy iglesia del Cristo de la Luz. Ca Según Titus Burckhardt, este tipo de bóveda influyó en la gestación de la bóveda de crucería gótica.
25 Bóveda de la mezquita de Bab al-Mardum, en Toledo, hoy iglesia del Cristo de la Luz. Ca Según Titus Burckhardt, este tipo de bóveda influyó en la gestación de la bóveda de crucería gótica.
26 Chartres. Rosetón oeste. Juicio FinalChartres. Rosetón oeste. Juicio Final. Cristo en el centro, rodeado del Tetramorfos y de los arcángeles. En su rotación perpetua, la rueda plasma el tiempo; pero su cubo, que permanece fijo, corresponde a la Eternidad y a la Verdad que juzga a lo efímero.
27 Chartres. Rosetón sur. Cristo en su gloria, con el cáliz en la mano, bendiciendo a los seres celestiales que forman un círculo alrededor de Él y de los 24 Ancianos, que, con sus laúdes, cantan alabanzas. Cristo es el sol divino y la vidriera entera su aureola.
28 Chartres. Rosetón norteChartres. Rosetón norte. La Virgen María con el Niño sobre sus rodillas en el centro del rosetón. Sostiene el cetro de flor de lis. Las palomas del Espíritu Santo descienden sobre Ella, los serafines y los querubines revolotean alrededor, mientras que sus antepasados, los reyes de Judá, la rodean con un segundo círculo. Aquí, la rueda del mundo se ha convertido en rosa, flor de la pureza, la inocencia y la nobleza de alma, que abre su cáliz en una rueda dispuesta a absorber el sol del Espíritu divino.
29 Chartres. Pórtico N. Puerta central. TímpanoChartres. Pórtico N. Puerta central. Tímpano. Todo el Pórtico Norte está dedicado a la Antigua Alianza, a la preparación de la venida de Cristo. El tímpano, en este caso, se llena con la gloria de la Virgen. Siguiendo la Leyenda Dorada (tomo I, cap. CXIX), a la izq del dintel su muerte, rodeada de Cristo y de los apóstoles; a la dcha del dintel, su cuerpo (revestido de eterna juventud) llevado sobre un lienzo por ángeles por encima del sepulcro, y en el tímpano propiamente dicho, su Coronación en el cielo por Cristo. Se trata de una glorificación de la Reina del Cielo de una exquisita delicadeza. Todo este ciclo de la Muerte, Resurrección, Asunción y Coronación de la Virgen es apócrifo. Véase Émile Mâle, pág. 276.
30 Chartres. Pórtico N. Puerta centralChartres. Pórtico N. Puerta central. Parteluz con Santa Ana llevando a la Virgen niña en sus brazos. Santa Ana enarbola aquí el receptáculo de la Encarnación del Verbo, que es María. El lugar preeminente de la madre de la Virgen, se debe a que en Chartres se guardaba una de sus reliquias, concretamente su cabeza, enviada, nos informa Émile Mâle, desde Constantinopla por el conde de Blois en El propio Émile Mâle (El arte religioso del siglo XIII en Francia, Madrid, Encuentro, 2001, pág. 345) reproduce un acta del Cartulario de la catedral: “La cabeza de la madre fue recibida con gran gozo en la iglesia de la hija”.
31 Chartres. Pórtico N. Puerta central, derrame izqChartres. Pórtico N. Puerta central, derrame izq. Melquisedec con el cáliz (el ángel que hay encima está señalando al carnero que está debajo de los pies de Isaac), Abraham con su hijo Isaac maniatado, Moisés con las Tablas de la Ley y la serpiente de bronce, Samuel con el cordero del sacrificio y el rey David. Los dos derrames de esta puerta central constituyen el conjunto escultórico más antiguo de los dos pórticos del transepto, y se fechan a principios del siglo XIII. Todas estas figuras de los dos derrames alrededor del parteluz con Santa Ana y la Virgen, son los cristóforos, que enarbolan los emblemas del Verbo divino. / La serie más antigua es la de Senlis; de ella dependen todas las demás.
32 Chartres. Pórtico N. Puerta central, derrame izqChartres. Pórtico N. Puerta central, derrame izq. Sacrificio de Abraham (sentido histórico): el carnero toma el lugar de Isaac y es prefiguración del Hombre-Dios. Sentido alegórico: Abraham, al ofrecer a su hijo bienamado, se sacrifica a sí mismo. Sentido tropológico (figurado): el sacrificio de Isaac santifica a toda su descendencia, el pueblo de Israel. Sentido anagógico: el sacrificio de Isaac es prefiguración del sacrificio del Hombre-Dios. La columna con la serpiente de bronce simboliza la elevación de Cristo en la cruz. David con una corona de espinas, como el rey que sufre por su pueblo.
33 Chartres. Pórtico N. Puerta central, derrame dchaChartres. Pórtico N. Puerta central, derrame dcha. Isaías, Jeremías, el anciano Simeón, San Juan Bautista y San Pedro apóstol. Isaías designa “el renuevo que brotará de la raíz de Jesé”; surge del vientre de Jesé, echado bajo los pies del profeta. Jeremías tiene sobre el pecho una cruz inscrita en un círculo. Simeón lleva al Niño Jesús, al que acaba de acoger sobre el altar. San Juan Bautista también con un cordero (“he aquí al cordero de Dios que quita los pecados del mundo”). El cáliz que lleva San Pedro supone que se cierra el ciclo abierto con Melquisedec, según opinión de Émile Mâle.
34 Chartres. Pórtico N. Puerta lateral izq.Las estatuas de Lía y Raquel, así como las de la Iglesia y la Sinagoga, fueron destruidas durante la Revolución de 1789.
35 Chartres. Pórtico N. Puerta lateral izq. TímpanoChartres. Pórtico N. Puerta lateral izq. Tímpano. Representa la historia del nacimiento de Cristo. En el dintel, a la izq, la Natividad, y a la dcha, el Anuncio a los pastores. En el tímpano propiamente dicho, a la dcha, el sueño de los Reyes Magos, y a la izq la Adoración de los Reyes Magos al Niño Jesús.
36 Chartres. Pórtico N. Puerta lateral izq. DerramesChartres. Pórtico N. Puerta lateral izq. Derrames. En el derrame de la izq, la Anunciación y el profeta Daniel (sin cabeza). En el derrame de la dcha, la Visitación y el profeta Isaías. Tanto uno como otro profeta fueron anunciadores de Jesús. La Virgen de la Visitación reposa sobre la zarza ardiendo.
37 Chartres. Pórtico N. Puerta lateral dchaChartres. Pórtico N. Puerta lateral dcha. En el tímpano, el juicio de Salomón y los sufrimientos de Jacob.
38 Chartres. Pórtico N. Puerta lateral dcha. Derrame de la izqChartres. Pórtico N. Puerta lateral dcha. Derrame de la izq. Prefiguraciones humanas de Jesús y de María: Salomón, a la dcha, la reina de Saba y Balaam sobre una burra. Balaam profetizó el nacimiento de Cristo. La reina de Saba, como esposa de Salomón, prefigura a la Iglesia como esposa de Cristo. Pisa a un negro cargado con presentes del país de Ofir.
39 Chartres. Pórtico N. Puerta lateral dcha. Derrame de la dchaChartres. Pórtico N. Puerta lateral dcha. Derrame de la dcha. José, el hijo de Jacob, a la dcha; en medio, Judit o Esther; a la izq el profeta Jesús Ben Sirá, autor, según el texto griego, del Eclesiástico.
40 Chartres. Pórtico S. Puerta centralChartres. Pórtico S. Puerta central. Todo este Pórtico está dedicado a la Nueva Alianza. Parteluz con la estatua del Salvador. Las estatuas de los dos derrames representan a los Apóstoles. Antes de los rasgos de las figuras pertenecen todavía a la forma muy generalizada de un tipo tradicional; de tal modo que, al contemplarlas, no preocupa la cuestión del parecido.
41 Chartres. Pórtico S. Puerta central. TímpanoChartres. Pórtico S. Puerta central. Tímpano. Representación del Juicio Final. Cristo está flanqueado por la Virgen y por San Juan Evangelista (Déesis o Déisis). Los ángeles encima de Cristo portan los instrumentos de la Pasión. Toda esta representación del Juicio Final, que no es nada habitual que esté colocada al sur, hay que leerla como una prolongación y una ampliación de la Majestas Domini, la expresión de la victoria divina y de su esplendor.
42 Chartres. Pórtico S. Puerta centralChartres. Pórtico S. Puerta central. Parteluz con la estatua del Salvador. Sus pies pisan un león y un dragón, imágenes de la muerte y del pecado. Por encima de la cabeza se cierne la Jerusalén celeste de doce torres. En la zona inferior del parteluz, las obras de caridad. Este Cristo muestra los límites aún tolerables de la tendencia a la humanización, a la expresividad psicológica y al naturalismo: gran parte de la Majestas Domini del Pórtico Real ha desaparecido ya. Este Cristo se nos aparece como un hombre noble, equilibrado y sabio. Y, sin embargo, su apariencia, gracias a que el escultor renunció a subrayar cualquier emoción, traduce una espiritualidad mucho más profunda que la mayoría de los Cristos más tardíos: la dulce inmovilidad de su expresión deja la puerta abierta a lo inexpresable.
43 Chartres. Pórtico S. Puerta centralChartres. Pórtico S. Puerta central. Parteluz con la estatua del Salvador (Christ enseignant). Sus pies pisan un león y un dragón, imágenes de la muerte y del pecado. Por encima de la cabeza se cierne la Jerusalén celeste de doce torres. En la zona inferior del parteluz, las obras de caridad. Este Cristo muestra los límites aún tolerables de la tendencia a la humanización, a la expresividad psicológica y al naturalismo: gran parte de la Majestas Domini del Pórtico Real ha desaparecido ya. Este Cristo se nos aparece como un hombre noble, equilibrado y sabio. Y, sin embargo, su apariencia, gracias a que el escultor renunció a subrayar cualquier emoción, traduce una espiritualidad mucho más profunda que la mayoría de los Cristos más tardíos: la dulce inmovilidad de su expresión deja la puerta abierta a lo inexpresable.
44 Chartres. Pórtico S. Puerta izq. TímpanoChartres. Pórtico S. Puerta izq. Tímpano. En el registro inferior, el martirio de San Esteban (Saint Étienne). En el registro superior, Cristo flanqueado por dos ángeles arrodillados.
45 Chartres. Pórtico S. Puerta izq. Derrame izq. MártiresChartres. Pórtico S. Puerta izq. Derrame izq. Mártires. San Rolando o San Teodoro de Heraclea, el soldado de Dios, a la izq. Le siguen (¿?) San Esteban, San Clemente y San Lorenzo. Sobre los soldados San Teodoro de Heraclea y San Jorge, comenta Louis Gillet que se trata de una pareja militar y fraterna, dióscuros de la caballería. Figuras de hierro y dulzura, de sabiduría y de buena conciencia, de Cruzada y justicia. Sin gestos, en tranquilo reposo, con la mano sobre el escudo y la espada en la vaina, velan. Nada hay en ellos desafiante, provocativo, jactancioso. Dicen simplemente: “Estoy dispuesto”. Su rostro tranquiliza y no amenaza. Sobre su frente paciente está escrita una consigna augusta: la bondad. Bajo su cota de mallas late un corazón magnánimo. Es el guerrero del siglo, que equivale para nosotros al de Pericles… Sobre sus rasgos corteses y benévolos flota un reflejo de San Luis. Vencedores de la Bestia y de la Violencia, nos enseñan que la Fuerza es lo mismo que la Paz, que el buen soldado no es, como se cree, aquel que mata, sino aquel que inmola su vida por la salud de sus hermanos.
46 Chartres. Pórtico S. Puerta izq. Derrame dcha. MártiresChartres. Pórtico S. Puerta izq. Derrame dcha. Mártires. San Vicente, San Dionisio, Saint Rustique (o San Piat) y San Jorge (o San Adrián).
47 Chartres. Pórtico S. Puerta dcha. Derrame izq. ConfesoresChartres. Pórtico S. Puerta dcha. Derrame izq. Confesores. Desde la izq, San Nicolás de Myra (o de Bari), San Ambrosio, San León (o San Silvestre) y San Laumer (un santo de la diócesis de Chartres, que había santificado, nos dice Louis Gillet, las soledades del bosque de la Perche, recordaba la belleza de la vida de los eremitas). Émile Mâle señala (pág. 354) que, en esta portada, están frente a frente San Nicolás de Myra y San Martín de Tours, esto es, el gran taumaturgo (hacedor de milagros) de Oriente y el de Occidente. El culto de San Nicolás no fue realmente popular hasta después de la traslación de sus reliquias de Myra a Bari (sur de Italia) en 1087.
48 Chartres. Pórtico S. Puerta dcha, derrame dcha. ConfesoresChartres. Pórtico S. Puerta dcha, derrame dcha. Confesores. San Martín de Tours, San Jerónimo, San Gregorio Magno y San Avito (ésta última es más tardía).
49 Chartres. Pórtico S. Puerta dcha, derrame dchaChartres. Pórtico S. Puerta dcha, derrame dcha. San Martín de Tours (con la mitra en la cabeza y el báculo pastoral en la mano, escribe Louis Gillet, entre las oleadas llenas de unción de su casulla eclesiástica, maestro de la autoridad moral, mezcla de emperador, de sacerdote y de taumaturgo, estatua del poder espiritual y del mando), San Jerónimo (con una Biblia entre las manos) y San Gregorio Magno (como un augur inspirado que parece dialogar con el pájaro posado sobre su hombro). Esta puerta es conocida como Puerta de los Confesores. Escultor particularmente dotado, que bebe en la fuente de su propia madurez espiritual, llegando a dar forma a una imagen tan próxima a la realidad que parece conjugar irresistiblemente la naturaleza y la santidad hasta en sus menores detalles. El escultor que hizo estas tres figuras, sin duda estuvo protegido contra lo arbitrario de un desbordamiento de su sensibilidad por la actitud hierática y la sensibilidad manifiestamente aristocrática de su tiempo.