1 Serie de Predicaciones en Linares, Nuevo Léon, 23 de Diciembre de 2015

2 Introducción Una de las peguntas más antiguas de la tierra. Quizás las que menos repuestas satisfactorias ha recibido. Somos las criaturas, no el Creador para conocer todas las repuestas. Hay una cosa peor que el Sufrimiento, es sufrir SIN Dios como fuente de consuelo y paz.

3 I. UNA PREGUNTA ANTIGUA CON MALAS INTEPRETACIONES Cicerón decía: “Mientras el dolor no sea un gran verdugo, puede ser un gran maestro ”. Epicurio, Filosofo Griego del siglo III A.C. ha producido un planteamiento que ha servido como plataforma desde entonces para los de mentalidad escéptica. La tendencia universal de muchos ha sido culpar a Dios por todo el sufrimiento en el mundo.

4

5 Demoliendo la Teoría Epicueana: 1. El sufrimiento no podría ser IGUAL al poder de Dios, porque entonces no tendría poder para vencerlo. 2. La Omnipotencia de Dios podría tener propósitos ocultos a los hombres pero calculados por el Creador para traer a Sus propósitos un plan. 3. Desde la infiltración del pecado entre los humanos, este mundo dejo ser el mejor mundo para vivir.

6 Un ejemplo de esta mala interpretación del sufrimiento es la religión Hindú del Karma que dice que todas las acciones de la vida hoy, son el resultado de las acciones de una vida previa en el pasado. Miserias como la pobreza, la ceguera, el hambre, la deformación física y otros males son el pago por estos hechos cometidos en una previa existencia de cada ser humano.

7 Los Judíos tenían sus propias malas interpretaciones acerca del Sufrimiento: 1. “¿Pensáis que estos galileos, porque padecieron tales cosas, eran más pecadores que todos los hombres que habitan en Jerusalén? Os digo: No; antes si no os arrepentís, todos pereceréis igualmente” (Luc.13:1-5).

8 2. Sus propios discípulos le preguntaron: “Rabí, ¿Quién pecó, éste o sus padres, para que haya nacido ciego? (Jn.9:1-2). En el Antiguo Testamento la dificultad no era menor: 1. Uno de los Jueces (Gedeón) preguntó: ¿Por qué nos ha sobrevenido todo esto? ¿Y dónde están todas sus maravillas, que nuestros padres nos han contado, diciendo: ¿No nos sacó Jehová de Egipto? Y ahora Jehová nos ha desamparado, y nos ha entregado en mano de los madianitas” (Josué 6:12- 13).

9 2. La Viuda de Sarepta le reprochó al profeta Elías: ¿Qué tengo yo contigo, varón de Dios? ¿Has venido a mí para traer a memoria mis iniquidades, y para hacer morir a mi hijo?” (1 Rey.17:18). 3. El profeta Habacuc se preguntaba: “¿por qué ves a los menospreciadores, y callas cuando destruye el impío al más justo que él?” (1:13). 4. El patriarca Job exclamó: “Está mi alma hastiada de mi vida; Daré libre curso a mi queja, Hablaré con amargura de mi alma. Diré a Dios: No me condenes; Hazme entender por qué contiendes conmigo. ¿Te parece bien que oprimas, Que deseches la obra de tus manos, Y que favorezcas los designios de los impíos?” (10:1-3).

10 II. Conceptos Contemporáneos frente al Sufrimiento 1. Si no somos capaces de discernir los motivos de nuestro sufrimiento, podemos al menos asumir una postura correcta frente al sufrimiento. Esto quiere decir, que aunque no podremos entender el trasfondo de las adversidades, si podemos y debiéramos reaccionar adecuadamente a los infortunios y dolores que encontramos en la vida.

11 Cuatro Conceptos que describen Reacciones diversas al Sufrimiento. 1. El Concepto Docético. El sufrimiento no es real, es solo una ilusión. Lo Docétistas no ofrecen nunca explicación sólo intentan sanarlo al negarlo. 2. El Concepto Estoico. Argumentan que no hay nada para cambiar el curso de los eventos humanos. Asumen que fuerzas poderosas impersonales de la naturaleza ya están determinadas.

12 3. El Concepto Hedonista. Dicen que tenemos que disfrutar los placeres de la vida porque son un equilibrio a los sufrimientos que experimentamos. 4. El Concepto Existencialista. Para ellos la vida es absurda y los sufrimientos o placeres que pudieran ocurrir no tienen sentido. Es algo de lo que no tenemos que preocuparnos.

13 III. El Sufrimiento y la Elección Humana Evidentemente, mucho del sufrimiento que aflige al ser humano es el resultado directo de sus acciones equivocadas. El individuo que decide jugarse su salario en un juego de apuestas hasta perderlo todo. El conductor que después de una fiesta con sus amigos decide manejar completamente embriagado para más tarde impactar su vehículo contra otro y provocar la pérdida de vidas, el cónyuge que en un momento de debilidad decide coquetear con alguien en su trabajo que no es su pareja avanzando en la relación hasta cometer adulterio destruyendo así el amor y el compromiso con su cónyuge, etc. Son ejemplos cotidianos que provocan sufrimiento en millones en el mundo.

14 Alguien podría sugerir, ¿Por qué no eliminamos ese libre albedrio de modo que nadie jamás cometa un error en su vida y así no acarrear ningún sufrimiento en las personas. El problema con esta imposible solución es que “es más caro el remedio que la enfermedad” Porque si eliminamos esta cualidad esencial del ser humano de su existencia, despojamos al hombre de mucha de la razón de su misma existencia.

15 Roger Dickson señaló: “Para que el hombre fuera verdaderamente libre, debía tener el poder de elegir entre el bien y el mal. ¿Por qué no nos hizo Dios de una manera que no pudiéramos pecar? Desde luego, Él hubiera podido, pero recordemos que si Él lo hubiera hecho así, no seríamos seres humanos, sino maquinas. ¿Te gustaría estar casado con una muñeca que habla? Una persona que no es libre de hacer el mal es una contradicción lógica” ( El Ocaso de los Incrédulos, 110). Bernard Ramm coincidió al escribir que “La libertad, para ser verdadera libertad, tiene que ser una libertad entre opuestos. La libertad restringida o confinada podría existir, como quizás para un animal, pero no puede ser así con él hombre, hecho a imagen de Dios. La libertad, tiene que ser libertad entre opuestos radicales, entre pecado y santidad, entre bien y mal, entre el diablo y Dios… Por esto, el mal tiene que ser una verdadera posibilidad para el hombre, porque sólo esta posibilidad radical hace que sea verdaderamente libre, y sólo en tanto que es verdaderamente libre, es el hombre imagen de Dios” ( The God Who Makes a Difference, 129).

16 C. S. Lewis (1898-1963) escribió en la forma franca que siempre le caracterizó a este gran novelista y dramaturgo Inglés de mediados del siglo pasado, “Algunos piensan que se pueden imaginar una criatura libre pero sin la posibilidad de actuar mal. Yo no lo creo. Si algo es libre para hacer bueno, es también libre para hacer lo malo. Y la libertad de la voluntad es lo que ha hecho posible el mal. ¿Por qué, entonces, les dio Dios libre albedrio? Porque el libre albedrio, aunque hace posible el mal, es también lo único que hace posible la dignidad de disfrutar de cualquier amor bondad o gozo” ( Mero Cristianismo, 52). “Mira, yo he puesto delante de ti hoy la vida y el bien, (“la prosperidad” nota al margen de LBLA ) la muerte y el mal (“la adversidad”)… A los cielos y a la tierra llamo por testigos hoy contra vosotros, que os he puesto delante la vida y la muerte, la bendición y la maldición; escoge, pues, la vida, para que vivas tú y tu descendencia” ( Deut.30:15, 19 ).

17 Los Incrédulos siempre han reprochado a Dios el sufrimiento del mundo, pero cierran sus ojos a la verdad que es el hombre, y no Dios, quien se ha equivocado en sus “caminos”. Es el hombre creado con la capacidad de elegir “entre bien y mal”, que siguiendo sus propios intereses ególatras y ambiciosos que ha desencadenado la larga lista de sufrimientos y dolores que ha padecido la humanidad. ( Prov.14:12 ).

18 Job había estado muy inquieto sobre sus padecimientos severos. Los discursos de sus amigos Elifaz, Bildad y Zofar sólo habían agudizado su dolor y producido su indignación. Cuando Dios le desafía con 77 preguntas (Job.38- 41), Job no fue capaz UNA SOLA de ellas. Fue entonces cuando reconoció su ignorancia y pequeñez. “He aquí soy vil; ¿qué te responderé? Mi mano pongo sobre mi boca. Una vez hablé, mas no responderé; aun dos veces, mas no volveré a hablar” (vv.4-5). “¿Invalidaras tú también mi juicio? ¿Me condenaras a mí, para justificarte tú? ¿Tienes tú un brazo como el de Dios?” (v.8-9).

19 Dios puede hacer todo lo que es posible hacer. Pero Él no puede hacer círculos “cuadrados”, o cuadrados “redondos” o triángulos de “cuatro lados”. Estas cosas no existen ni pueden existir. Así que no hay contradicción entre la Omnipotencia de Dios y la existencia de la maldad o el sufrimiento. Hay un ser malevolente que si tiene todo el interés en que los humanos cometamos todas las malas decisiones posibles que provoquen la mayor cantidad de sufrimiento a nosotros mismos y a otros y este es Satanás quien “como león rugiente anda buscando a quien devorar” (1 Ped.5:8).

20 IV. Perspectivas Positivas del Sufrimiento El Sufrimiento nos Vuelve Mejores Hijos de Dios. Nos ayuda ha desarrollar el carácter que Dios quiere que tengamos. El hijo prodigo no fue mejor hasta padecer cruentas necesidades (Luc.15:17-19). Pedro no fue mejor hasta llorar amargamente (Luc.22:62) 2. El Sufrimiento nos Ayuda ha Desear Intensamente el Cielo. Seguramente para muchos que gozan de los placeres temporales del pecado (Heb. 11:25) no querrán que su vida se termine sobre la tierra. Pero a los Hijos de Dios que sufren por causa de la justicia, (1 Ped.3:17) le serán enjugados “toda lágrima de sus ojos” (Apoc.21:4; cf. 7:17).

21 C. S. Lewis escribió: El espíritu humano ni siquiera empezara a tratar de rendir su voluntad propia mientras le parezca que las cosas marchan bien para el… El error y el pecado tienen ambos esta misma propiedad: que cuánto mas profundos, tanto menos sospecha la víctima de la existencia de ellos; son males enmascarados el dolor, en cambio es un mal desenmascarado, inequívoco; toda persona sabe que algo anda mal cuando esta sufriendo. Pero el dolor insiste en ser atendido. Dios nos susurra en nuestros placeres y habla nuestra conciencia; pero en cambio grita en nuestros dolores; el es megáfono que Él usa para hacer despertar a un mundo sordo. ( Problema del Dolor, 92,93,95)

22 3. El Sufrimiento nos Abre la Posibilidad de Glorificarle a Dios. Los fieles Cristianos no sólo le glorificamos con nuestra vida también le pudiéramos glorificar con nuestra muerte. ¿Quién puede decir que la muerte de Esteban resultó en vano ?, ¿Quién puede decir que este valiente mártir no glorificó a Dios con su muerte? (Hech. 7: 55-60). La muerte de Jesús es otro ejemplo claro de esto. El dijo antes de morir: “Yo te he glorificado en la tierra; he acabado la obra que me diste que hiciese. Ahora pues, Padre, glorifícame tú al lado tuyo, con aquella gloria que tuve contigo antes que le mundo fuese”(Juan.17:4-5)

23 4. En el sufrimiento no sólo el hombre sufre también sufre Dios. En la agonía de Su Hijo bajo las manos inicuas de pecadores ¿Quien puede decir que Dios no estaba ansioso por ayudar a rescatar a su propio Hijo de tan despreciable muerte? (Mt.27:38-46) “Y Cristo, en los días de su carne, ofreciendo ruegos y súplicas con gran clamor y lágrimas al que le podía librar de la muerte, fue oído a causa de su temor reverente” (Heb.5:7)

24 Conclusión: Le invitamos ha ser una profunda reflexión de su vida. El sufrimiento aunque a veces desafiante, lacerante y despiadado para la vida, no es el último veredicto de la existencia humana. La condición espiritual del alma Sí lo es. ¿Puede ser que Dios no retire todo el sufrimiento que aflige su vida pero si es capaz de quitar todo su pecado al venir a la obediencia en Cristo? (Col.2:12-13). Viste nuestro blog: www.elexpositorpublicasiones.wordpress.com